En memoria de MARÍA GABRIELA LETELIER CERDA, su luz brilla en cada acto de bondad y coraje. Que su ejemplo de resiliencia y gratitud nos inspire a abrazar cada nuevo amanecer con amor y esperanza. En los recuerdos que atesoramos de ella, encontramos la fuerza para seguir adelante, sembrando paz en nuestros corazones. Que la memoria de MARÍA GABRIELA sea un faro de luz en nuestra oscuridad, recordándonos que la vida es un regalo precioso que merece ser vivido con pasión y compasión. Que su legado perdure en nuestras acciones y en cada latido de esperanza.
Sus funerales se efectuaron el jueves 28 en Concepción.