En memoria de Adolfo Sáenz-Villarreal Montaña, su legado de amor y coraje perdura en cada corazón que tocó. Que su fuerza inspire resiliencia en tiempos de adversidad, su gratitud enseñe a valorar cada instante y su paz guíe tus pasos en el camino. Que su recuerdo sea un faro de esperanza, recordándonos la belleza de la vida y la importancia de seguir adelante con valentía. Que en cada amanecer encuentres la fuerza para abrazar el día con amor y los desafíos con determinación.