En el recuerdo de Juanita Armendáriz Elórtegui, su luz perdura como fuente inagotable de amor y gratitud. Su coraje y resiliencia nos inspiran a enfrentar cada desafío con valentía. En medio de la nostalgia, encontramos paz en su legado de esperanza y bondad. Que su memoria sea un faro de luz que guíe nuestros caminos hacia un futuro lleno de amor y serenidad. Recordemos siempre su espíritu generoso y su sonrisa eterna, y llevemos adelante su legado con humildad y confianza en el poder del amor para sanar y transformar nuestras vidas.
Familia Lavín Muñoz